Desde la ventana

El lunes entregamos la primera parte del trabajo de fin de semestre, e decir el primer ejercicio del semestre. Y nos fue bakan.

Somos un grpo que lleva trabajando ya un rato juntos. COn ellos hice el corto final del año pasado y tambien recibimos hartas flores. También hicimos el documental del primer semestre... y todas las veces, nos ha ido bien. Al principio para mi (y supongo que para ellos) fue como terapia de shock. Tomemos en cuenta que yo tengo como 10 años más de los que tienen ellos y que yo venía hace ratísimo trabajando sola, aca en casa, con días enteros donde no pronunciaba palabra, porque todas las tipeaba nada más. Así que al principio entendernos fue dificil. Hablábamos lenguajes distintos y teníamos visiones distintas sobre cómo abordar los trabajos de la U.

Hoy, siento que casi casi, somos amigos. Nos peleamos y nos reconciliamos, salimos a tomar y hacemos los trabajos. Con algunos hablamos de cosas más profundas y personales, con otros solo nos reímos, pero siento que con todos se ha formado un vínculo de afecto, de cariño.

Y si bien al principio yo pensaba que "esos pendejos" jamás podrían tener nada que enseñarme a mi, me han enseñado cosas de mi misma que yo ni siquiera veía. He crecido con ellos y gracias a ellos, ellos me enseñan cuando no entiendo, y yo les enseño a ser más responsables, ellos me ayudan a relajarme cuando ando muy tensa, y yo los ayudo a cumplir cuando andan demasiado en las nubes. Son unos niños lindos y debo decir que es un orgullo para mi compartir con ellos.

Mi grupo de trabajo es el mejor, me apoyaron cuando hice de directora y ahora yo apoyo para que la cosa funcione. He aprendido a confiar en ellos, a creer en ellos y en mi misma también, en el trabajo de todos. Trabajar en grupo es todo un desafío y con mis compañeritos bakanosos resulta perfect.



0 commentarios: