Hoy tuve una salida con mis padres...
Hace unas semanas, mi papá comentó que habría un concierto de Fulano. Es un grupo chileno que toca música Jazz fusión y que mis viejos vienen escuchando desde que yo era niña. He ido a conciertos de Fulano toda mi vida. Entonces cuando mi padre anunció en el almuerzo que Fulano (que llevaba hasta hoy como 8 años sin tocar en vivo) mi hermano y yo soltamos un "ohhhhhh". Mi mamá propuso entonces que fueramos todos. A mi, la verdad, salir con mis papás, por alguna extraña razón siempre me ha incomodado. Mi mamá es medio rarita... si bien nos crió, como que no entiende el humor que tenemos y se toma en serio todas las barbaridades que nos decimos con mi hermano. Fuera de eso, es dificil hablar con ella de cualquier tema que no sea su trabajo y sino es eso probablemente no diga nada porque está demasiado cansada. Mi papá es divertido, pero tiene otra onda muy distinta a la mía y mi hermano es medio enojón y se pone cargante y como buen hermano chico me wevea infinitamente. Mis viejos siempre fueron muy aprensivos, entonces nunca pude comunicarme con ellos, porque todo lo que hacía rayaba en la delicuencia, a pesar de que los que me conocen saben que soy super miliquienta para mis cosas y me carga andar haciendo ordinarieces como tomar en la calle, sin contar de que muchas veces ni tomo. Entonces... el panorama, si bien era tentador por el concierto mismo, era un panorama para el que me tenía que predisponer, pero finalmente con mi hermano dijimos que sí queríamos ir y mi papá nos entregó nuestras entradas ayer en la noche.
Hoy, entonces, nos juntamos con mi papá y mi mamá antes del concierto (mi hermano estaba at the hospital, for a change), nos tomamos un café y ahí empezó mi noche. Mientras me tomaba mi café e intentaba comunicarme con estos seres que me parecen tan poco accesibles, me di cuenta de que siempre voy a sentirme de 5 años cuando esté con ellos, de que comunicarme con ellos de igual a igual es una tarea que quizás nunca llegue a puerto y que siempre que esté a su lado volveré a ser esa niña pecosita y juguetona con ojos grandes. Luego de eso nos fuimos al concierto, donde se nos unió mi hermano menor (que hoy más bien parecía mi hermano mayor de 30, el hospital lo tienen cagao a ese wn). Alcanzamos a sentarnos y partió el concierto.
Fue un gran concierto, sin duda alguna. Fulano es una gran banda... pero yo nunca he escuchado un disco de Fulano de corrido. Excepto esa vez que tenia 8 y nos fuimos a la playa y ese era el único casette que había en el auto. O esa otra vez, cuando nos fuimos al sur en auto desde santiago los 4. Cuando ibamos pasando por las ciudades con mi viejo tomando fotos (fotos que hoy cuelgan de las paredes de mi casa), mi vieja, mi hermano y yo vestidos casi iguales con unos cortavientos para qué más ochenteros. Esa vez... la misma en que el Lada de mierda se nos echó a perder y tuvimos que dejarlo botado en Osorno para seguir el viaje en tren y bus, hasta que nos volvimos en el sillón cama del tren y con mi hermano alucinábamos porque había camas (y camarotes!) dentro del tren. O la otra vez, cuando nos llevaron a un concierto de Fulano y eramos tan chicos que mi hermano se quedo dormido y tuvieron que llevarlo en brazos al auto y luego sacarnos a los dos en brazos de agotados que estabamos.
Hoy, mientras movía la cabeza al ritmo de la música, pensaba en cuando mi papá quiso aprender a tocar saxofón y tomaba clases con el saxofonista de Fulano y cuando practicaba se metía dentro de un biombo que tenia insonorizado para no molestar a los vecinos. O en los castillos de arena que construíamos durante las vacaciones. O las largas tardes de lectura o los cuentos inventados, o las cosquillas. Hoy, mientras escuchaba esa música pensaba que soy artista. Soy de esas artistas que niegan serlo, porque lo encuentran medio perdedor, a priori. Soy de esos artistas que no quieren tener que luchar contra el sistema y que odian el sistema porque no está hecho para que los artistas vivan de su arte. Soy de esos artistas medio punks, medio vendidos al sistema. Y hoy, mientras veía a estos artisas volver al escenario con el teatro lleno de gente de todas las edades aplaudiendolos de pie, pensaba en que soy artista gracias a que mis viejos me hacían imaginar que ese monticulo de arena era un castillo, que mi papá era un monstruo y venía a capturarnos para matarnos de las cosquillas. Pensaba que de tanto verlos leer, empecé a pedir libros. Que de tanto ver a mi papá tocar la guitarra, pedí una...
que de tanto ser artista yo podía ahora, escuchar esta música extraña, loca, con unos tiempos poco comunes, sin letra y mucha improvisación y sentirme viva, con los pelos de punta, con un nudo en la garganta de tanta emoción, de tanta lucidez, de tantas ganas de que el mundo fuera un lugar mejor.
mapas mundo
Hace 13 años
2 commentarios:
que lindo relato.. la familia, hay dias que te preguntas como puedo ser tan diferente a mama, o como es posible que a pesar de las diferencias nos queramos tanto...??
me rei con eso de los viajes familiares con un solo casete? me paso igual, de aria a viña en auto con solo 2 discos, unos de Sandro y otro de Piero...!!!!!!!!!! lo gracioso es que por muy insoportable que se hizo y a pesar de que cada vez que llegabamos a una ciudad sintonizabamos la radio, hasta el dia de hoy, con mi hermano y mi papa, escuchamos una melodia, de esos personajes (que mi mama adora), nos miramos y nos reimos...
recordando ese viaje en particular
un abrazo y exito en tus proyectos
Holaaaa
Pucha yo no tengo ninguna de las historias que tienes tú, de familia ni nada, pero te juro que encontré super rico tu relato, hasta me lo llegué a imaginar :)
Voy a darle una oportunidad a Fulano... puede que me guste ;)
Un abrazo
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